Diario Información,Aspe,12.04.2013
El proyecto de restauración del cauce también ha contemplado la ordenación de los excedentes de la depuradora para que sean aprovechados por los regantes

PÉREZ GIL
El Ministerio de Medio Ambiente entregó ayer al Ayuntamiento de Aspe, a través de la Confederación Hidrográfica del Júcar, las obras de restauración ambiental del río Tarafa que se han venido acometiendo, por fases, desde 2011. En la actuación, que ha sido cofinanciada con fondos europeos, se han invertido 5,3 millones de euros pero también se han ejecutado una serie de obras para reordenar las aguas excedentes de la estación depuradora que se vierten al río Tarafa.
A partir de ahora las aguas residuales de Aspe ya no se arrojarán al cauce, tal y como se ha venido haciendo desde que se construyó la depuradora. Los caudales tratados serán impulsados al embalse del Rabosero para que la Comunidad de Regantes de la Huerta Mayor puedan regar sus cultivos a través de la "Aciequica".
"De este modo -explicaba ayer el alcalde Manuel Díez- se van a evitar los malos olores que se venían produciendo en el casco urbano sin que el caudal del río se vaya a ver, por ello, ni perjudicado ni reducido". Es más, el primer edil afirma todo lo contrario. "Las aguas -puntualiza- van a estar mucho más limpias porque el Tarafa va a seguir manteniendo intactas todas las aportaciones hídricas de nacimientos subterráneos como La Rafica y la Fuente de Barrenas que nutren su caudal".


Por su parte la presidenta de la Confederación del Júcar, María Ángeles Ureña, recordó que el objetivo de esta obra ha buscado restablecer la función principal del río y defender sus márgenes contra las avenidas, así como formar un corredor fluvial a lo largo del cauce, de sus riberas y terrenos anexos, potenciar la vegetación autóctona y adecuar las infraestructuras hidráulicas existentes que forman parte del patrimonio cultural local. Para conseguirlo se ha actuado en los 9 kilómetros de cauce y márgenes del río que van desde su inicio, en el Camino Viejo de Hondón, hasta su desembocadura en el río Vinalopó. "Con esta actuación se dota al Tarafa de un pasillo verde que mejora el paisaje urbano y brinda al municipio un espacio para el paseo y el desarrollo de prácticas deportivas, lúdicas y de ocio", señaló por último Ureña en su visita a las obras en las que fue acompañada por el alcalde Manuel Díez, la exalcaldesa Nieves Martínez, ediles y técnicos de la Confederación.